La banca vuelve a estar en el foco de las miradas y los temores de los mercados internacionales. Las noticias se llenan con reportes sobre el Silicon Valley Bank y el Credit Suisse, mientras las autoridades buscan inyectar confianza en el sector financiero para evitar nuevas corridas.
Desde la caída del Silicon Valley Bank en Estados Unidos, los mercados financieros de ese país y el mundo entero se han sacudido. Se habla de la mayor quiebra bancaria en Estados Unidos desde 2008 y de "pánico financiero" a nivel global. Poco después, surge entre los titulares otro nombre: Credit Suisse, uno de los bancos suizos con más peso a nivel global, cuyas acciones se desplomaron y tuvo que recibir un importante salvavidas para no terminar de hundirse.
¿Con estas medidas podemos decir que el sector financiero está a salvo? Algunos expertos aseguran que la crisis no ha finalizado. El temor al contagio de la crisis del SVB ha lastrado a las bolsas de todo el mundo, al sector bancario y ha pesado sobre las negociaciones de los futuros del petróleo. En Argentina, por ejemplo, la quiebra de SVB repercutió en los bonos soberanos, con una caída en sus precios que hicieron disparar el riesgo país 6.5 % por una mayor aversión al peligro debido al contexto global.
¿Por qué quebró el Silicon Valley Bank (SVB)? La quiebra se dio tras una corrida bancaria, luego de que el banco anunciara que llevaría a cabo algunas acciones para paliar dificultades financieras. El 8 de marzo anunció que iba a ampliar su capital intentando reunir US$2,250 millones a través de la venta de acciones. El aviso asustó a muchos clientes, quienes retiraron inmediatamente sus fondos, provocando así la mayor quiebra bancaria en Estados Unidos desde la crisis de 2008.
Las dificultades financieras del SVB tienen que ver con una escalada de las tasas de interés de la Reserva Federal (Fed) para contener la inflación. El SVB había comprado bonos del Tesoro estadounidense a largo plazo, antes de que las tasas comenzaran a aumentar. Al aumentar las tasas de interés, el valor de esos antiguos bonos disminuyó ya que aparecen nuevos que pagan tasas más elevadas.
El SVB, con sede en California, es uno de los principales bancos de Estados Unidos. Trabaja con el sector tecnológico desde 1983, sobre todo con fintechs y fondos que invierten en empresas que no cotizan en bolsa. La empresa ha ido creciendo de forma sostenida desde su creación a fines de los 80 y en los últimos años, en particular durante la pandemia y con el auge de las tecnológicas, alcanzó sus valores más altos de cotización, superando en octubre de 2021 los US$700 en Nasdaq. Ahora, está intervenido por las autoridades.
En cuanto al Credit Suisse, este es uno de los bancos con mayor peso a nivel global, cuyas acciones se desplomaron poco después de la quiebra del SVB. Si bien ha recibido un importante salvavidas para no terminar de hundirse, algunos expertos aseguran que la crisis no ha finalizado. El Consejo de Estabilidad Financiera lo colocó a finales de 2021 y 2022 en la lista de los treinta bancos de importancia sistémica para el sector financiero. Su caída se evidenció cuando sus clientes retiraron $10,800 millones en depósitos en un solo día. En un intento por salvarlo de la quiebra definitiva, se anunció que será comprado por el banco UBS por 3,000 millones de francos suizos (US$3,200 millones).
A la fecha, la crisis bancaria ha salpicado a otros bancos, como el Signature Bank, Silvergate Bank, First Republic Bank, Western Alliance Bancorporation y PacWest Bancorp. Si bien la caída de estas acciones no ha sido una consecuencia directa del quiebre del Silicon Valley Bank, sí están relacionadas con la incertidumbre existente en el mercado.
Además de la crisis en el sector bancario, hay otros factores que influyen en la incertidumbre global, como la inflación. A medida que los principales bancos centrales suben bruscamente las tasas de interés para controlarlos precios altos, el sector bancario mundial se somete a tensiones. Es posible que esta sea una de las causas de la caída de los bancos en Estados Unidos y en el resto del mundo.
En conclusión, la crisis bancaria del Silicon Valley Bank y del Credit Suisse ha generado un clima de incertidumbre en el sector financiero y ha tenido un impacto en las bolsas de todo el mundo. Los reguladores buscan inyectar confianza en el sector financiero para evitar nuevas corridas y controlar la inflación. Los inversores observan con atención la evolución de los bancos y las medidas que se tomen para contener los efectos de la crisis. Estaremos atentos para seguir informando sobre la evolución de estos escenarios.
Opiniones
relacionadas