La Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) se reúne esta semana  y el mercado espera que aún no se anuncie el inicio de la reducción de compras de activos por parte del banco central estadounidense, conocida como tapering, debido a las condiciones aún débiles de la mayor economía del mundo.

“Las medidas de estímulo de la Fed buscan inyectar dinero a la economía, ya sea con tasas bajas o con la recompra de bonos. Sería arriesgado comenzar a desmontarlas si la recuperación es aún incierta”, detalló César Addario Soljancic, vicepresidente regional de EXOR LATAM para Centroamérica y el Caribe.

Los inversores prevén que la Fed seguirá adelante con sus planes de iniciar el tapering este mismo año, y posiblemente comience a mover tasas en 2023. El banco central estadounidense ha dicho que para ello se debe cumplir su meta de inflación del 2 % y el alcanzar el empleo pleno en Estados Unidos. Analistas esperan que la Fed anuncie oficialmente planes de reducción progresiva durante la reunión de noviembre y comiencen a recortar en diciembre o enero.

Entre la reactivación afectada por la variante delta del COVID-19, y reportes decepcionantes sobre la creación de nuevos puestos de trabajo en agosto, la situación está lejos de mejorar rápidamente.