Redacción EXOR

S&P Global Ratings ha elevado la calificación a largo plazo de Brasil de "BB-" a "BB" este martes, tras la aprobación de una importante reforma fiscal. Según la agencia, esta decisión refuerza el historial pragmático del país en los últimos años.

Este avance representa un triunfo para el presidente Luiz Inácio Lula da Silva y coloca a la economía más grande de América Latina a solo dos escalones de alcanzar una calificación de grado de inversión en la escala de S&P. Una calificación más alta indica mayor solvencia crediticia, lo que ayuda a los países a emitir deuda a tasas de interés más bajas. La semana pasada, el Congreso de Brasil aprobó una importante reforma del impuesto al consumo, vista como una medida para impulsar el crecimiento económico, aunque su implementación efectiva dependerá de proyectos de ley subsecuentes y un período de transición prolongado.

Tras mejorar su perspectiva para Brasil en junio, S&P ahora la ha revisado a "estable". Esto refleja el potencial avance lento del país en abordar los desequilibrios fiscales y sus todavía débiles perspectivas económicas. Sin embargo, esto se equilibra con una sólida posición externa y una política monetaria que está ayudando a reanclar las expectativas de inflación, añadió la agencia.

El Ministerio de Hacienda de Brasil acogió con satisfacción la mejora en la calificación y reafirmó su compromiso con la reforma. "Esto no solo contribuirá al mejor equilibrio fiscal del gobierno, sino que también conducirá a tasas de interés más bajas y mejores condiciones crediticias, asegurando al mismo tiempo la estabilidad de precios", indicó en un comunicado.