A dos días de conocer la decisión de política monetaria que anunciara la Reserva Federal de Estados Unidos, con expectativas de un alza en la tasa de interés de 50 puntos -la más alta en más de tres años-, el rendimiento de los bonos del Tesoro se dispara a 3 % -el de 10 años y el de 30 años- y los principales índices bursátiles de Wall Street vuelven a caer.

A pesar de la caída del Producto Interno Bruto (PIB) en Estados Unidos que reflejó una contracción de 1.4%, las probabilidades apuntan a que la Fed mantendrá su intención de aprobar este ajuste, en un momento en que las cadenas de suministros vuelven a verse complicadas, por los bloqueos en China por el COVID-19, y amenazan con hacer aún más difícil atacar la alta inflación.

Y, aunque no se publicara el gráfico de puntos con los ajustes propuestos por los miembros del Comité, sí es posible que se publique una fecha para iniciar la venta de bonos del balance del organismo que alcanza los 9 billones de dólares. El banco central busca bajar liquidez por distintas vías para desestimular demanda. (Investing)