Redacción EXOR

El precio del Petróleo de Texas (WTI) cerró este miércoles con una fuerte bajada del 4.1%, situándose en US$69.38 por barril, su nivel más bajo en los últimos cinco meses desde fines de junio.

Esta marcada tendencia a la baja se ha mantenido durante cinco sesiones consecutivas, coincidiendo con la cumbre de la OPEP+ celebrada la semana pasada, la cual fue considerada por analistas como fallida debido a su incapacidad para impulsar los precios del petróleo.

Al cierre de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros de WTI para entrega en enero registraron una pérdida de US$2.94 en comparación con la jornada anterior. En un patrón similar, el precio del Brent también experimentó una marcada caída del 3.76%.

La semana pasada, varios miembros de la alianza OPEP+ (Organización de Países Exportadores de Petróleo y aliados), incluyendo a Arabia Saudí y Rusia, anunciaron nuevos recortes "voluntarios" en sus suministros para el primer trimestre de 2024. Sin embargo, esta medida fue recibida con escepticismo por parte de los inversores, lo que contribuyó a la presión bajista en los precios del petróleo.

Además, hoy la agencia Moody’s rebajó la calificación crediticia de China de estable a negativa, generando dudas sobre la fortaleza del gigante asiático, que es el segundo consumidor de petróleo del mundo.

Por otro lado, los contratos de futuros de gas natural para enero también experimentaron una caída de US$0.133, cerrando en US$2.57, mientras que los contratos de gasolina con vencimiento en el mismo mes disminuyeron US$0.07, llegando a US$2.03.