Redacción EXOR

Después de tres semanas consecutivas vendiendo, los inversores extranjeros han retomado la compra de bonos japoneses a largo plazo, aunque los analistas advierten que este rebote podría ser efímero debido a las continuas incertidumbres del mercado. Según datos del Ministerio de Finanzas de Japón, estos inversores adquirieron bonos a largo plazo por un valor de 1.7 billones de yenes (aproximadamente US$10,930 millones), la mayor compra en ocho semanas, durante la semana que finalizó el 10 de mayo.

Al mismo tiempo, vendieron cerca de 2.43 billones de yenes (unos US$15,620 millones) en bonos a corto plazo, después de haber adquirido aproximadamente 3.78 billones de yenes (US$24,300 millones) la semana anterior. Estas transacciones ocurren en un contexto en el que el Banco de Japón mantuvo estables las tasas de interés a finales de abril, continuando con sus habituales compras de bonos.

A pesar de la estabilidad aparente, existen preocupaciones sobre los desafíos que aún enfrenta el mercado de bonos de Japón, incluyendo el potencial de una política monetaria más estricta, la volatilidad del yen y el incremento de la inflación.

En el mercado de acciones de Japón, los flujos transfronterizos se redujeron a 17.28 mil millones de yenes durante la semana que terminó el 10 de mayo, frente a las salidas de aproximadamente 263.31 mil millones de yenes de la semana anterior, según los datos de las bolsas de valores. Aun así, los inversores extranjeros adquirieron cerca de 263.61 mil millones de yenes en acciones al contado, motivados por una sorpresa negativa en el crecimiento del empleo en Estados Unidos que reavivó las esperanzas de recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal este año.

Además, vendieron contratos de derivados por valor de aproximadamente 280.89 mil millones de la última semana.

Mientras tanto, los inversores domésticos japoneses continuaron siendo vendedores netos de bonos extranjeros a largo plazo por tercera semana consecutiva, retirando cerca de 396.6 mil millones de yenes de manera neta. Sin embargo, invirtieron cerca de 21 mil millones de yenes en instrumentos de deuda a corto plazo.