Exor - Latam Centroamérica
28 de Enero, 2025
Redacción
EXOR
Los
inversionistas de bonos en Estados Unidos están adoptando un enfoque defensivo
en sus portafolios, anticipando una mayor volatilidad debido a la incertidumbre
en torno a las políticas de la administración Trump y las señales de que los
recortes de tasas de interés de la Reserva Federal podrían mantenerse en pausa
durante un tiempo prolongado.
El
Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Fed se prepara para anunciar
esta semana su decisión de política monetaria, con expectativas de mantener la
tasa de interés de referencia en un rango de 4.25%-4.50%. En su conferencia
posterior, el presidente de la Fed, Jerome Powell, probablemente adoptará un
tono cauto, permitiendo que los responsables de política evalúen el impacto de
las medidas fiscales de la administración Trump, incluidas las posibles tarifas
y la reducción de impuestos.
A
pesar de la fortaleza de la economía estadounidense y el mercado laboral,
persisten riesgos de inflación, como un posible repunte debido a aranceles
amplios y presiones salariales derivadas de cambios en las políticas
migratorias.
"Agregar
duración a la incertidumbre no parece una buena idea, especialmente cuando no
sabemos qué sucederá el próximo año," afirmó Byron Anderson, jefe de renta
fija en Laffer Tengler Investments.
En
los últimos meses, los inversionistas han reducido su exposición a bonos de
largo plazo, a pesar de que los rendimientos del Tesoro a 10 años alcanzaron
máximos de 14 meses. Según un reciente informe de JP Morgan, los inversionistas
han adoptado una postura más neutral en la curva de rendimiento, concentrándose
en activos de mediana duración, entre tres y cinco años.
El
mercado de futuros de tasas de interés ahora proyecta dos recortes de 25 puntos
básicos para este año, tras un reciente ajuste en las expectativas. Sin
embargo, algunos analistas advierten que los recortes adicionales dependerán de
una desaceleración económica más severa de lo esperado.
Además,
el creciente déficit fiscal de Estados Unidos, que alcanzó el 6% del PIB en
2024, ha reducido el apetito por bonos de largo plazo. Brian Ellis, gerente de
portafolio en Morgan Stanley Investment Management, señaló que el mercado
enfrentará la emisión de aproximadamente US$14.6 billones en bonos del Tesoro
en los próximos dos años, lo que podría presionar al alza los rendimientos si
la demanda de los compradores no logra absorber la oferta.
"La
incertidumbre sobre las políticas fiscales y monetarias es extremadamente alta
en este momento," comentó Guneet Dhingra, jefe de estrategia de tasas en
BNP Paribas. "Ser neutral en el mercado de bonos del Tesoro es la
estrategia más prudente dado el panorama actual."
Este
enfoque refleja la cautela de los inversionistas ante un entorno económico
marcado por políticas impredecibles y presiones fiscales, lo que mantiene a los
mercados atentos a las decisiones de la Fed y la administración Trump.