Redacción EXOR

Los prestatarios corporativos de Estados Unidos están capitalizando un fuerte interés del mercado, con una emisión de casi US$16,000 millones en bonos de alta calificación el miércoles. Esta cifra se suma a una oleada de emisión de US$29,000 millones el martes, ya que las empresas buscan aprovechar la demanda de los inversores antes de la publicación de datos económicos clave.

Entre los emisores se encuentra la utility Pacificorp, propiedad de Berkshire Hathaway, que recaudó US$3,800 millones en bonos. Estos fondos se destinarán a la amortización de deudas y al financiamiento de reclamaciones por los incendios forestales en Oregón y el norte de California. Otras transacciones del miércoles incluyen la venta de US$2,500 millones en notas por parte del banco francés Credit Agricole y otros US$2,500 millones por parte del brazo financiero del fabricante de automóviles Hyundai.

Scott Schulte, jefe del escritorio de deuda de grado de inversión en Barclays, explicó: "Las empresas están aprovechando el ‘efecto de enero’ ya que los inversores comienzan a desplegar capital de inversión fresco en el nuevo año después de la tranquila segunda mitad de diciembre". Schulte también señaló que la urgencia de cerrar tratos a principios de semana se debe a la noción de que el significativo declive en los rendimientos de los bonos del Tesoro a fin de año fue posiblemente excesivo y los datos económicos clave que se publicarán más adelante esta semana podrían revelar una sorpresa inflacionaria.

La actividad del miércoles sigue a un sólido desempeño el martes, donde dieciséis prestatarios vendieron US$29,300 millones en bonos, la cifra más alta desde el Día del Trabajo en septiembre pasado y el segundo mejor inicio de año después de 2023, según un informe del miércoles de BMO Capital Markets.