Redacción EXOR 

El último informe del Índice de Precios al Consumidor (CPI) de Estados Unidos, publicado el martes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), reveló un ligero descenso en la inflación, situándola en un 3.1% para los 12 meses que terminaron en noviembre. Este cambio representa un sutil alejamiento de las altas tasas de inflación recientes, aunque el índice sigue estando por encima de los niveles deseados por la Reserva Federal.

Al excluir los componentes más volátiles como alimentos y energía, el índice básico se mantuvo estable con un crecimiento anual del 4%, marcando el nivel más bajo desde septiembre de 2021. Los datos del CPI coinciden en gran medida con las expectativas de los economistas y aportan otra señal de que la inflación alta está disminuyendo lentamente.

Este informe es una noticia positiva tanto para la Reserva Federal como para los estadounidenses, quienes finalmente comienzan a ver que sus ingresos no se ven completamente consumidos por el aumento de precios. Según datos separados publicados también el martes por la BLS, el salario horario promedio real aumentó aproximadamente un 0.8% en tasa anual en noviembre, lo que representa el octavo mes consecutivo de crecimiento tras 24 meses en territorio negativo.

Sin embargo, la inflación aún se mantiene por encima de los niveles que la Reserva Federal considera ideales. "Los precios siguen en aumento, aunque de manera constante, y continúan presionando a los consumidores", comentó Tyler Schipper, profesor de economía y análisis de datos en la Universidad de St. Thomas en St. Paul, Minnesota, en una entrevista con CNN.

En términos mensuales, el CPI aumentó un 0.1% desde octubre. El índice básico del CPI subió un 0.3% respecto al mes anterior, igualando la tasa de crecimiento del mes anterior. "Aunque hay indicios de mejoría económica con beneficios reales para los consumidores, si hiciéramos una encuesta en la calle en este momento, todavía no estaríamos en el punto ideal", añadió Schipper.

El informe señala un avance gradual hacia una estabilidad económica, aunque los expertos advierten que aún queda camino por recorrer para alcanzar un equilibrio inflacionario deseado.