Redacción EXOR

La dinámica del mercado de bonos está experimentando un fenómeno notable: los valores de la zona euro están moviéndose en una sincronía casi perfecta con sus contrapartes de Estados Unidos, marcando una correlación históricamente alta. Este fenómeno se produce a pesar de las claras diferencias en el ritmo económico entre las dos regiones, con los inversores mostrando un interés predominante en las variables de inflación y tasas de interés.

Aunque el vasto mercado de bonos de EUA tiene una influencia reconocida a nivel global, el actual nivel de correlación ha dejado perplejos a analistas especializados, especialmente teniendo en cuenta las dificultades económicas que enfrenta la zona euro. Investigaciones realizadas por el banco estadounidense State Street revelan que la correlación en los rendimientos de los bonos a dos años entre Alemania y EUA ha alcanzado un pico sin precedentes. Similarmente, las correlaciones en segmentos de bonos a largo plazo también muestran un incremento significativo.

"Es bien sabido que EUA lidera las tendencias del mercado, pero la escala actual es sorprendente", señala Jon Jonsson, gestor de carteras de renta fija senior en Neuberger Berman. "Hemos visto un aumento dramático en las correlaciones, algo realmente excepcional". Mientras que la economía de EUA muestra signos de fortaleza y avance, Europa se ha quedado rezagada, impactada por un gasto gubernamental más conservador durante la pandemia y las consecuencias de la crisis energética.

En 2023, el crecimiento del producto interior bruto de la zona euro se limitó a un modesto 0.5%, en marcado contraste con el incremento del 2.5% registrado en EUA. Los indicadores de actividad del sector privado también reflejan esta divergencia, con EUA en expansión y la zona euro en contracción.