Los principales mercados de renta variable a nivel global se estabilizan respecto a las primeras semanas del año en un contexto de incertidumbre sobre las presiones inflacionistas, la normalización de la política monetaria en las economías avanzadas y las elevadas tensiones geopolíticas.

Junto a ello, se modera la volatilidad en los mercados europeos y estadounidenses, cayendo el VIX del S&P 500 y del Euro Stoxx 50 a niveles de en torno a 27 puntos tras los repuntes de las últimas jornadas por encima de 30 puntos.

El foco de interés de los inversores se mantiene en los mensajes de los principales bancos centrales y en la evolución de los indicadores macroeconómicos. En la sesión de ayer, los índices adelantados PMI de China confirmaron la desaceleración de la economía de la primera potencia mundial en la actual coyuntura marcada por la política cero covid del Gobierno de Xi Jinping, la debilidad de la demanda interna, los desequilibrios en el sector inmobiliario y la disrupción de las cadenas de valor globales.

Respecto a la política monetaria, esta semana será el turno de las reuniones del BCE y el Banco de Inglaterra, tras confirmar la semana pasada la Reserva Federal estadounidense que finalizará su programa de compra de bonos en marzo, abriendo a la puerta a la primera subida de tipos.

En la primera jornada de la semana, las principales bolsas europeas frenaron su tendencia bajista y cerraron al alza, lideradas por el DAX 40 alemán. El Íbex 35 español se mantuvo prácticamente plano (+0,03%) y por encima de 8.600 puntos.