Redacción EXOR

Un consorcio de bancos de Wall Street, incluyendo a Morgan Stanley, Bank of America, Barclays y Mitsubishi UFJ, ha vendido la última porción de deuda asociada a la compra de Twitter (ahora X) por parte de Elon Musk. Esta transacción marca el cierre de un proceso de desinversión que ha durado casi dos años desde la adquisición de la plataforma por US$44,000 millones en 2022.

El tramo final, valorado en $1,200 millones, se vendió a 98 centavos por dólar, ofreciendo un rendimiento del 9.5%. Con esta operación, los bancos han logrado deshacerse de la totalidad de los US$13,000 millones en deuda que mantenían en sus balances desde la compra de la red social.

La financiación original de la adquisición incluyó un préstamo a plazo garantizado de US$6,500 millones, una línea de crédito rotativa de US$500 millones, un préstamo no garantizado de US$3,000 millones y otros US$3,000 millones en préstamos garantizados. La venta de esta deuda se vio facilitada por la relación cercana de Musk con el presidente estadounidense Donald Trump y por las perspectivas de mejora en los ingresos de X.

El mes pasado, Musk anunció que su empresa de inteligencia artificial, xAI, había adquirido X en una operación que valoró la plataforma en US$33,000 millones.