Redacción EXOR

El Banco de México afirmó la fortaleza del sistema financiero del país, a pesar de la debilidad económica y los riesgos asociados a la volatilidad del mercado y posibles conflictos comerciales.

En su informe semestral de estabilidad financiera, el banco central destacó que las instituciones financieras mexicanas mantienen una posición sólida y resiliente, con niveles de capital y liquidez superiores a los mínimos regulatorios.

Durante el segundo semestre del año, los mercados mexicanos enfrentaron volatilidad significativa debido a las elecciones en México y Estados Unidos, además de las amenazas de aranceles del 25% a las importaciones mexicanas anunciadas por el presidente electo de Estados Unidos.

La incertidumbre por las reformas constitucionales en México también impactó la moneda local, aunque los mercados financieros se mantuvieron relativamente ordenados.

El informe señaló que, aunque los riesgos identificados para la estabilidad financiera son limitados, choques inesperados o severos podrían afectar su adecuado funcionamiento. También identificó riesgos relacionados con tensiones geopolíticas, conflictos comerciales y un posible debilitamiento adicional de la economía nacional, cuyo crecimiento proyectado es de 1.8% para 2024 y 1.2% para 2025.

El fenómeno del nearshoring, donde empresas multinacionales instalan capacidades de manufactura en México para estar más cerca del mercado estadounidense, continúa en marcha y ha impulsado el crédito bancario. Este proceso, que requiere tiempo para materializarse, se espera que tenga un impacto sostenido en la economía mexicana en los próximos años.