Redacción EXOR 

El Banco de Canadá (BoC) probablemente reducirá su tasa clave de interés nocturna este miércoles por segunda vez en dos meses, tras recientes datos que mostraron una desaceleración de la inflación, un gasto restringido y un panorama económico poco alentador. 

El mes pasado, el BoC recortó su tasa de interés en 25 puntos básicos, llevándola a 4.75% después de mantenerla en su nivel más alto en más de dos décadas durante casi un año. Con este primer recorte en cuatro años, el BoC se convirtió en el primer banco central del Grupo de los Siete en hacerlo desde la pandemia. 

Una encuesta de Reuters publicada el viernes reveló que casi tres cuartas partes de los economistas encuestados entre el 16 y el 19 de julio esperan una reducción de la tasa a 4.50% esta semana. 

El estratega de tasas del National Bank of Canada, Taylor Schleich, también espera que el banco central reitere que futuros recortes dependerán de los datos entrantes. 

En el momento del último recorte, el gobernador del BoC, Tiff Macklem, señaló que cualquier reducción futura de la tasa sería dependiente de los datos. 

Los mercados financieros ven una probabilidad de casi el 93% de un recorte de tasas esta semana y anticipan una disminución total de 75 puntos básicos en los costos de endeudamiento este año. 

El BoC anunciará su decisión de política monetaria el 24 de julio a las 9:45 a.m. ET (1345 GMT). También publicará el Informe de Política Monetaria trimestral, que incluirá nuevas previsiones sobre el crecimiento económico y la inflación para 2024, que se esperan sean más bajas que las anteriores. 

La inflación se desaceleró más de lo esperado al 2.7% en junio, con las medidas de inflación subyacente también disminuyendo marginalmente, lo que refuerza el argumento para otro recorte en las tasas. Aun así, la inflación sigue cerca del límite superior del rango objetivo del banco de 1%-3%. 

Los economistas están preocupados porque los precios al consumidor no están bajando lo suficientemente rápido como para permitir que el banco sea más agresivo en impulsar una economía débil. 

El crecimiento económico de Canadá ha sido positivo este año, pero apenas alentador. El aumento del desempleo también ha resaltado las limitaciones económicas y los temores de una recesión. 

Gran parte del crecimiento se ha atribuido al aumento de la población impulsado por la inmigración, más que a la fortaleza inherente de la economía. En su último Informe de Política Monetaria en abril, el banco estimó que el crecimiento en 2024 sería del 1.5% y del 2.2% en 2025. 

Randall Bartlett, director senior de economía canadiense en Desjardins Group, señaló que las cosas están muy débiles, particularmente en términos per cápita. 

En una encuesta la semana pasada, el BoC encontró que la disposición de las empresas a invertir está por debajo del promedio debido a una demanda débil. 

En el sector de la vivienda, sensible a las tasas, la demanda no ha repuntado. Los datos de ventas minoristas publicados la semana pasada mostraron que el gasto del consumidor se contrajo en mayo y probablemente mostrará una disminución en junio. 

Avery Shenfeld, director gerente y economista jefe de CIBC Capital Markets, mencionó que la economía ahora opera con una visible holgura económica desinflacionaria y que el Banco probablemente mencionará nuevamente las renovaciones de hipotecas como un obstáculo. 

A pesar de la persistente debilidad económica, es probable que el BoC se abstenga de realizar recortes de tasas mayores a 25 puntos básicos. 

Randall Bartlett concluyó que el Banco de Canadá será muy gradual en aliviar la presión.